jueves, 4 de febrero de 2016

Llévame contigo

Hay días oscuros en los que desearía que una mano invisible me golpeara, dura, fuertemente, hasta hacerme suplicar ahogada en llanto que cese su maltrato. Hasta que gritar duela demasiado como para seguir haciéndolo, hasta que el olor a sangre sea tan intenso que nuble el resto de mis sentidos. Hasta hinchar mis ojos, romper mis labios. Hasta tapizar mi cuerpo con moretones, insultos y escupitajos. Todo ello para mostrar "por fuera" lo mutilada y humillada que me siento "por dentro".

No hay comentarios:

Publicar un comentario